Las monedas virtuales o criptodivisas no existen físicamente, por lo que mucha gente se sorprende de que haya que hacer algún trabajo para crearlas. Este proceso es una forma de recompensar a los mineros de una criptomoneda concreta. A cambio de su trabajo, reciben la criptodivisa recién creada y pueden utilizarla fácilmente para pagar en el Casino Betnero u otros servicios.
El trabajo de los mineros es extremadamente importante para la infraestructura de blockchain, ya que cuantos más mineros (nodos) trabajen, más eficazmente funcionará la red. También lo hace más distribuido y seguro. Actualmente existen diferentes tipos de minería de criptomonedas, pero los dos que se comentarán a continuación son los más populares.
Minar criptomonedas no es una tarea fácil, así que antes de empezar, merece la pena averiguar qué problemas te esperan. Uno de los inconvenientes es la dificultad de la extracción y el rendimiento de la inversión. Hay que calcular si la minería será rentable.
El número de monedas minadas depende del ROI (retorno de la inversión).
La complejidad de la minería aumenta a medida que más excavadores se unen a la red. Cuanta más capacidad de procesamiento tenga una cadena de bloques determinada, menos criptomonedas se minarán. El talón de Aquiles de la minería es también el consumo de energía. Antes de conectar la maquinaria a la electricidad, conviene comprobar el sistema de alimentación para que no haya problemas de falta de energía. También requiere habilidad, tiempo, conocimientos y equipos caros.
Se refiere a la minería de criptomoneda de forma remota. El nombre proviene de la asociación de la esencia de Cloud Mining para la extracción de oro, pero aquí no necesitamos una excavadora ni una pala. Recuerda que minar criptomonedas en la nube genera mucho calor y consume mucha electricidad.
La eficiencia depende principalmente del rendimiento computacional del dispositivo en relación con la energía utilizada para hacerlo funcionar. Puede ser que si tienes un equipo demasiado débil, simplemente no sea rentable minar.
Así pues, la minería en la nube no es más que alquilar «excavadoras» a cambio de un beneficio tangible. Y estos beneficios vienen determinados principalmente por el tipo de cambio de criptodivisas que se busque. Dado que el propietario de la excavadora actúa como intermediario en nuestra empresa, ¿debería estar siempre seguro de su integridad? Un broker sin escrúpulos se llevará todas las criptodivisas encontradas, que usted ya no podrá recuperar.
Así pues, la minería en la nube tiene sus desventajas, pero también grandes ventajas. En primer lugar, no tienes que preocuparte por la eficiencia computacional de tu dispositivo ni por posibles fallos de hardware. Al alquilar un revendedor, tampoco tenemos que pagar por el uso de la electricidad, que supone un gasto importante.
Sin embargo, la minería en la nube tiene la ventaja principal de que se puede poner en marcha de inmediato y se puede comprar tanta energía como se necesite en cada momento.
Como en todas las empresas, lo primero que hay que hacer cuando se explota en la nube es ser vigilante y precavido con las personas que se contratan. La minería en la nube permite un aumento inmediato de la eficiencia minera, pero su creciente complejidad puede reducir significativamente la rentabilidad de la empresa.
También depende de la duración del contrato. Cuanto mayor sea el tiempo de cooperación, mayor será la probabilidad de pérdidas debido al aumento de los costes de búsqueda y minería de criptomonedas. Los primeros meses pueden dar un pequeño beneficio, pero los siguientes pueden suponer una pérdida significativa del dinero invertido.